Miembros del Bayern Múnich reaccionan con satisfacción a la victoria por 1-0 ante el París Saint-Germain
El Bayern Múnich se impuso al Paris Saint-Germain por 1-0 en un duelo que exigió más de lo esperado al conjunto bávaro. El Allianz Arena fue testigo de un partido intenso, en el que el PSG, liderado por un mediocampo sólido y propuestas ofensivas bien trabajadas, representó un desafío significativo para el equipo dirigido por Vincent Kompany. “El PSG ha sido un rival fuerte. Tuvimos que moverlos mucho. Intentaron presionarnos, pero mantuvimos la calma”, reconoció Manuel Neuer, quien destacó la capacidad del Bayern para sobreponerse a la presión.
El gol decisivo llegó en el minuto 38, cuando Minjae Kim aprovechó un error en la salida del arquero Matvey Safonov tras un saque de esquina de Joshua Kimmich. Sin embargo, la ventaja no disminuyó la dificultad del encuentro. “Ellos tuvieron dos acciones en la primera parte que no estuvieron exentas de peligro. No dejamos que eso nos intimidara”, analizó Max Eberl, director deportivo del Bayern. La actuación del PSG fue especialmente destacada en el primer tiempo, con un esquema de cuatro centrocampistas que complicó las transiciones bávaras.
En la segunda mitad, la expulsión de Ousmane Dembélé en el minuto 57 dio un respiro al Bayern, pero no fue suficiente para desactivar por completo a los parisinos. Leon Goretzka resaltó la exigencia del rival: “Sabíamos de antemano lo que nos esperaba. Por su sistema, intentaron conservar mucho el balón y ponernos a prueba en la presión. Fue un partido muy intenso”.
El entrenador Vincent Kompany también reconoció la calidad del PSG y lo ajustado del encuentro. “Queríamos que los aficionados se fueran a casa satisfechos, y así ha sido. Estaba claro lo que querían hacer, y lo afrontamos bien. Básicamente, hoy hemos hecho un buen partido, pero podríamos haber marcado algún gol más para calmarlo un poco”, señaló. Kompany.
Esta victoria coloca al Bayern con 9 puntos en la fase de grupos de la Champions League, consolidando su posición como posible clasificado al repechaje. Mientras tanto, el PSG, bajo la dirección de Luis Enrique, se encuentra al borde de la eliminación con solo 4 puntos. “Sufrimos la presión del rival y no fuimos eficaces en nuestra propia presión”, admitió el técnico español. Ahora, el Bayern se prepara para su próximo desafío en la Bundesliga frente al Borussia Dortmund, con la confianza de haber superado a uno de los equipos más fuertes de Europa.
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