La leyenda del Bayern aprobó el curso UEFA-A de la Federación Italiana de futbol, por lo cual tiene licencia a entrenar a equipos de hasta el tercer escalafón
A dos años de haberse retirado del futbol profesional, la exestrella del Bayern München, Franck Ribéry, parece dispuesto a volver a escena, pero ahora desde los banquillos.
Jugador del Bayern entre 2007 y 2019, el habilidoso extremo continuó su carrera en Italia con la Fiorentina y con la US Salernitana, para terminar por colgar los botines en octubre de 2022.
Desde Italia, la federación de dicho país anunció que el francés culminó con éxito su curso de entrenador UEFA-A, por lo cual le otorgaron la licencia que lo acredita como director técnico. Con esta licencia, Ribéry tiene permiso a dirigir equipos en Italia de la Serie C o de categorías inferiores. También tiene permiso dirigir a equipos femeniles o juveniles de cualquier categoría.
El curso que realizó Ribéry constó de 192 horas de clase, las cuales tomó entre el 11 de junio y el 18 de julio, en los cuales tuvo que pasar algunas evaluaciones teóricas y prácticas.
«Ser entrenador me permitirá redescubrir la adrenalina y la presión de los entrenamientos y los partidos. No puedo vivir sin ellos, lo necesito para ser feliz».
Franck Ribéry, en entrevista con BILD
Leyenda absoluta del Bayern
Ribéry llegó al Bayern en el verano de 2007 procedente del Marsella de Francia a cambio de 30 millones de euros. Como jugador bávaro, fue pieza clave para que el cuadro de Múnich conquistase el triplete de 2013 (Champions League, Bundesliga y DFB Pokal). Como jugador bávaro, sumó otras ocho Bundesliga y cinco DFB-Pokal.
En su etapa en Alemania, Ribéry anotó 124 goles en 425 partidos y contribuyó con 182 asistencias.
Como jugador, fue 81 veces seleccionado francés y disputó la final del Mundial de Alemania 2006 que Francia perdió ante Italia. También participó en otras competencias como el Mundial de Sudáfrica 2010. El otro equipo para el que jugó, además de los anteriormente mencionados, fue el Galatasarray de Turquía.
La única experiencia de la leyenda del Bayern como entrenador fue en la US Salernitana. Específicamente, Franck se encargó de gestionar al equipo de la segunda división.
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