El Bayern Múnich tiene a futbolistas fantásticos en sus fuerzas básicas; solo requieren de más oportunidades
Cada vez que escucho o leo algún rumor de que el Bayern Múnich quiere fichar a “x” o “y” jugador pienso en todos los elementos de las fuerzas básicas que se están perdiendo de una oportunidad, y me pregunto si es culpa de ellos o de la directiva.
Desde que llegó Max Eberl al equipo a finales de febrero de este año, varios medios han reportado los intereses del equipo por conseguir a un portero que pueda ser el sucesor de Manuel Neuer y entonces me pregunto, ¿para qué trajeron a Daniel Peretz?
También se habla mucho de la posible llegada de Jonathan Tah y de un posible sustituto a Alphonso Davies, y aunque creo que Tah puede aportar mucho al equipo y también un David Raum, Federico Dimarco o Theo Hernández, no dejo de pensar que en el pasado el Bayern apostó por jugadores jóvenes y así es como tuvimos a laterales como Philipp Lahm, David Alaba o Joshua Kimmich.
Si el Bayern quiere reducir su masa salarial, ¿la salida de estos dos futbolistas no es una oportunidad de darle una chance definitiva a Tarek Buchmann y Adam Aznou? Al final seguirá habiendo competencia dentro del equipo porque están Hiroki Ito, Josip Stanisic y el propio Kimmich, como jugadores que saben jugar de central o lateral.
El mismo problema se replica en los extremos. Mucho se habla de que en el Bayern quieren dejar ir a Kingsley Coman y que se lo piensan con Leroy Sané y Serge Gnabry. ¿Por qué no dejar a dos extremos con cartel de titulares y dejar como tercera opción a jugadores talentosos como Nestory Irankunda y Mathys Tel? Elementos jóvenes, con ganas de trascender, con condiciones asombrosas y que seguramente podrán ayudar al equipo en momentos importantes.
Cuando vi volar a Oliver Kahn me convertí en aficionado del Bayern, pero si no fuese por los jugadores de cantera como Lahm, Bastian Schweinsteiger, Alaba, Mats Hummels, Toni Kroos, Holger Badstuber, y muchos, muchos más, jamás habría entendido el sentimiento “Mia San Mia”. Me entristece saber que jugadores como Pierre-Emile Hojbjerg, Mitchell Weiser o Emre Can no tuvieron la posibilidad de consolidarse en el club, porque habrían sido mejores futbolistas de lo que son ahora si se les hubiese proporcionado una chance.
Me preocupa que en un futuro Arijon Ibrahimovic, Paul Wanner, Armindo Sieb, Gabriel Vidovic, Lovro Zvonarek, Frans Krätzig o Maurice Krattenmacher se conviertan en un jugador más. ¿No son Aleksandar Pavlovic, Jamal Musiala y Thomas Müller, ejemplos latentes de los frutos que te puede proporcionar el confiar en la cantera?
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