En su primera entrevista desde que llegó al Bayern, el futbolista revela que su objetivo en el año es disputar la gran final de la UEFA Champions League en el Allianz Arena
Hiroki Ito llegó al Bayern Múnich el pasado mercado de verano procedente del VfB Stuttgart a cambio de 23.5 millones de euros con la promesa de convertirse en una solución a los problemas defensivos que aquejaban al primer equipo, principalmente por el mal desempeño de los centrales Dayot Upamecano y Kim Min Jae.
Lastimosamente, el central zurdo sufrió una fractura del metatarso en el amistoso de pretemporada ante el FC Düren (1-1) y no se ha podido recuperar desde entonces. Incluso, cuando parecía que por fin se recuperaba y alistaba para por fin debutar con la casaca del Bayern, se lastimó durante una práctica en el mes de octubre que le hizo tener que ser operado por una segunda ocasión.
“Es algo bastante duro… te hace pensar”, confiesa el japonés al canal de YouTube del FC Bayern. “Yo sé lo que puedo hacer y que voy a volver más fuerte. Los siguientes pasos son las carreras más intentas y más ejercicios con el balón”, revela el jugador, quien en este 2025, el japonés ha vuelto a entrenar en el campo, pero de forma separada.
Aunque Ito no ha podido jugar con el campeón récord alemán, mantiene contrato con el equipo hasta el verano del 2028, por lo que podría ser importante en el futuro. Él, sin embargo, desea jugar más pronto que tarde y ya se ha trazado un objetivo: “Mi meta es ganar dos trofeos esta campaña. Si puedes jugar la final de la Champions League en casa, tienes que estar ahí y ganar”.
Dentro de todo lo malo, lo bueno: Ito ya se ha adaptado a la vida en Alemania
Hiroki Ito llegó al Stuttgart en 2021, pero fue cedido dos veces antes de convertirse en un jugador importante de los Suabos en 2023. Con casi dos años viviendo en Alemania, el nipón ya se ha adaptado a la difícil vida teutona e incluso a Baviera, donde recala desde hace un semestre: “Me siento muy a gusto en el FC Bayern y en Múnich. Es una ciudad muy bonita, me gusta el Isar y el casco antiguo y, por supuesto, los restaurantes japoneses. Aquí hay muy buen sushi”.
El central considera que ha sido difícil aprender alemán, pero explica que su mentalidad japonesa le permite sobrellevarlo. “También me divierte porque cada día lo hago mejor. Hay un proverbio japonés que dice: Cuando vas a otro país, debes hacer todo como la gente de allí. Soy un típico japonés, la cortesía es muy importante para mí. La mentalidad alemana y japonesa es similar, por ejemplo, en cuanto a limpieza, educación y puntualidad. Pero no soy tímido y siempre lucho durante 90 minutos sobre el terreno de juego. En mi vida privada, puedo relajarme con mi familia, mi mujer y mi hija”, concluye.
Para poder jugar la final de la UEFA Champions League en el Allianz Arena, además de que el Bayern Múnich deberá de sobrepasar unas duras eliminatorias, el defensa japonés deberá de superar a Min Jae y Upamecano, quienes bajo el mandato de Vincent Kompany pasaron de ser dos defensas poco fiables a los mejores zagueros del futbol alemán.
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